LOS DUELISTAS (1908) JOSEPH CONRAD(1857-1924)
Estamos ante una de las obras capitales del autor. Es una novela corta, sin embargo una de las más conocidas de Conrad por haberse llevado al cine por Ridley Scott en 1977.
Está ambientada en plena época de las guerras napoleónicas, aunque el autor ahonda mucho más en el trasfondo de esa época terrible y fascinante.
Conrad nos presenta dos personajes estereotipados, de carácter intensamente
guerrero que protagonizan duelos sin sentido y participan en las guerra
napoleónicas.
Feraud. Bonapartista
fanático, pequeño, peludo y procedente de familia de herreros del sur de
Europa, y “de escasa capacidad mental” según HABERT.
D’Habert. Alto,
de facciones interesantes y unos bigotes de color maíz, flemático, de la Francia Norte. Reflexivo, muy molesto por las acusaciones de Feraud. “No ama al emperador”
Al final del estado de guerra, única condición social que conocieron, el
espectáculo de un mundo en paz, les aterrorizaba.
Feraud degradado y a media paga, malvive.
D’Habert. Un poco perdido, gracias a su hermana, se acomoda a la nueva situación monárquica.
Con su agudeza habitual, el autor se sumerge en la insensatez tanto del duelo como de una guerra. El duelo entre los dos personajes puede asemejarse al que Napoleón mantiene contra toda Europa que solo obedece a su carácter avasallador que fabrica enemigos y motivos para guerrear por doquier. Luego eso lo revestirá de ideas grandilocuentes como el honor, el orgullo patrio….
En ambos casos más por orgullo que por cualquier razón lógica. Ambas situaciones pueden calificarse como una auténtica locura
AUREA GUTIÉRREZ
En la puesta en común de este libro estuvimos muy participativos. Añadimos aquí ,también, uno de los hechos narrados que destacó Antonia:
El teniente Feraud, húsar del ejército francés, tiene un duelo con un miembro de una poderosa familia francesa en el que resulta herido de gravedad.
La familia se queja al comandante del ejército y éste
llama al teniente D’Hubert , ordenándole que busque a Feraud para que vaya al cuartel y
quede encerrado. Éste se ofende porque “ un soldadito “ lo busque, y lo reta a duelo.
Feraud es peleón, orgulloso, envidioso… En 15 años tienen tres duelos, siempre
provocados por él y siempre ganados por D’Hubert .
En el último
duelo, D’Hubert lo desprecia, y le dice que a partir de ahora, para él está
muerto y que no quiere volver a saber nada más de él.Feraud se va humillado.
Hay en el libro una frase horrible de Feraud,
refiriéndose a su prometida: “ La amaba tanto, que estaba dispuesto a matarla
antes de renunciar a ella “.
ANTONIA INIESTA
Un autor tan rico como el que nos ocupa es digno de que conozcamos algo de su vida. Manolo nos ofrece esta biografía:
BIOGRAFÍA DE JOSEPH CONRAD (1857-1924)
JOZEF TEODOR KONRAD KORZANIOWSKI , más conocido por su nombre literario, nació en 1857, en Berdyczow, entonces imperio ruso y actualmente Ucrania, y falleció en Inglaterra en 1924. Polaco de nacimiento, adquirió la nacionalidad inglesa en 1886, y está enterrado en el cementerio de Canterbury.
Pertenecía a una familia
de la baja nobleza. Su padre, poeta y traductor – entre otros, de Shakespeare y
Victor Hugo – era miembro del Partido Nacionalista Polaco, siendo deportado a
Siberia. A los 12 años, ya fallecidos sus padres, se trasladó a Cracovia, a
casa de unos tíos, en donde terminaría los estudios secundarios.
A los 17 años, viajó por
Italia, y en Marsella se enroló como marinero a bordo del buque Mont Blanc
(1875). Esta experiencia cambiaría su vida, pues con ella nacería su pasión –
que no abandonaría jamás – por la aventura, por los viajes, por los barcos y
por el mundo del mar.
De esta etapa de su vida (
18 a 22 años ) apenas se conocen datos, pues se empeñó en mantenerlos en
penumbra. Entre otros, se han documentado : un viaje por El Caribe, su apoyo
activo a la legitimidad napoleónica, un cierto asunto de contrabando de armas a
favor del bando carlista de España ( del que extrajo algún pasaje para su relato
EL TREMOLINO ), y según parece, hasta un intento de suicidio por razones
amorosas.
En 1878, para escapar al
reclutamiento militar ruso, se trasladó a Inglaterra, trabajando como
tripulante en barcos de cabotaje y ocupando el tiempo libre leyendo a Shakespeare,
lo que le permitió alcanzar un amplio dominio del lenguaje y del idioma en el
que escribiría, posteriormente, toda su obra. Tras obtener la nacionalidad
inglesa, pudo presentarse a los exámenes de aptitud para la marina mercante
inglesa, y, tras varios años de navegación, obtuvo el título de capitán, cargo
que desempeñó en varios barcos con bandera inglesa y australiana.
La profunda transformación
de la navegación marítima que supuso el paso del barco de vela al de vapor, le
pilló de lleno. Tuvo que elegir entre ellos y eligió al primero. Hasta 1895,
año en que publica su primera novela, LA LOCURA DE ALMAYER, contrae matrimonio
y se establece definitivamente en el sur de Inglaterra, surcó todos los mares,
visitó multitud de países, conoció diversidad de seres humanos y de historias
de todo tipo relacionadas con ellos, en las que los barcos y el mar son siempre
el escenario en el que tienen lugar, y que supo trasladar con gran belleza al
conjunto de su obra.
En 1898 pasa dificultades
económicas motivadas por su afición al juego, e intenta, infructuosamente,
incorporarse de nuevo a la marina inglesa. En 1916, en plena Guerra Mundial el
Almirantazgo le encarga diversas misiones de reconocimiento en algunos puertos
ingleses. Posteriormente, en 1923, Conrad rechazaría un título nobiliario
ofrecido por el Primer Ministro Laborista Británico.
Conrad, que nunca fue
revolucionario, conoció en uno de sus viajes al Congo el espanto de la
explotación colonial que reflejó de forma magistral en su libro EL CORAZON DE LAS TINIEBLAS, en el que
critica de forma acerada el culto obsesivo al éxito y al poder, y a la
capacidad del hombre para la destrucción de sus semejantes. Su acercamiento al
budismo,( a través de Schopenhauer ), generó en él una visión pesimista de la
conducta humana. Estos episodios agravaron su neurosis (presente a lo largo de
toda su vida y que lo había llevado al intento de suicidio) que, junto a otras
enfermedades, provocaron su muerte en 1924, causada por un ataque al corazón.
Algunas de sus obras son
etiquetadas de ROMANTICISMO, aunque tocadas por su propio virtuosismo poético. Se
le considera precursor del MODERNISMO (practicado por Rusell, Woolf, Joyce, Kafka
, caracterizado por el uso de más de un narrador, escenarios múltiples, saltos en
el tiempo y empleo del monólogo interior como forma narrativa ). Puede situarse
también dentro del IMPRESIONISMO y del SIMBOLISMO. Emplea el DESTINO FATAL de
los personajes de muchas de sus historias como una “visión simbólica del destino humano”, y expone como tema principal
de muchas de sus obras “ los conflictos propios del ser humano”, así como su
comportamiento en situaciones límite en las que se pone en riesgo la propia
vida, así como el sentido del deber y la responsabilidad y sus propios límites.
LOS
DUELISTAS, la última novela comentada en el Club de Lectura, es
considerada la novela más amable de Conrad.
MANUEL JIMÉNEZ